La asamblea de socios celebrada en el marco del Congreso de la semFYC de Sevilla instauró a Remedios Martín Álvarez como nueva presidenta de la sociedad. En la semana posterior a esta votación, y ya como presidenta electa, ha esbozado los retos de su mandato. Esta es la primera parte de la entrevista en la que analiza las claves a las que debe responder la sociedad en los próximos tiempos.
Cuéntanos tu historia con la semFYC. ¿Cuándo comenzaste a colaborar con la sociedad?, ¿cómo ha sido tu evolución hasta llegar a la presidencia?
Entré en la sociedad en 1993 o 1994, cuando aún era residente. Los R4 fueron a un Congreso de la semFYC en Madrid y vinieron encantados. Tanto, que nos dieron una sesión y, como una piña, nos apuntamos todos a la sociedad de Madrid. Desde ese momento siempre he estado vinculada a la semFYC, siguiéndola muy de cerca, hasta que en 1998 forme parte del Grupo de Trabajo de Comunicación y Salud de la somamFYC. Ya al año siguiente me vinculé al Grupo de Trabajo de la semFYC; y en el año 2008 empecé en la Junta Directiva del grupo de Comunicación, como vocal de Investigación. Durante todo ese periodo hasta el 2016 trabajé con la Gaceta Sanitaria impulsando los encuentros de investigación, las becas Francesc Borrell y todo lo que era la actividad de investigación. Al principio contaba con la ayuda de Luis Perula y después durante los dos últimos años, yo sola.
Años más tarde, en 2016, Pep Basora y Salvador Tranche me ofrecieron entrar a formar parte de la Junta Directiva. Me animé y entré como vocal de Investigación. Desde el 2019 comencé como secretaria de la Junta bajo el paraguas de Salvador. Ahora, durante 2022, he acompañado a Maria Fernández durante el periodo de su presidencia tras el fallecimiento de Salva; y desde el congreso de Sevilla, como presidenta electa.
¿Cuáles son los principales retos de la sociedad para los próximos años?
Este es un momento en el que hay mucho que hacer y hay varios retos abiertos, sobre todo en materia legislativa. Uno de los más interesantes es el Real Decreto de Especialidades y Áreas de Capacitación, las ACES. Poquísimos días después de la Asamblea de Sevilla pasó por el Consejo de Ministros el Real Decreto que abre la puerta a constituir nuevas especialidades y ACE. La verdad es que llevamos más de 15 años reivindicando una ACE de Urgencias y otra de Cuidados Paliativos.
La sociedad ya desarrolló la base para la implantación de las ACE de Urgencias y Emergencias y la de Cuidados Paliativos mediante dos documentos de resumen de su corpus de tronco en 2011 y 2015, respectivamente.
El Real Decreto permitirá un progreso asombroso en el reconocimiento de todas las vocaciones que existen en el seno de la Medicina Familiar y Comunitaria. De hecho, ya nos hemos puesto en contacto con la Comisión Nacional de la Especialidad para explicar esta posición de la sociedad a la solicitud de crear una ACE de Urgencias y Emergencias, y otra de Cuidados Paliativos.
Otro de los temas que está sobre la mesa es la recertificación ¿Hay novedades?
Sí, es otro asunto de fondo y un proceso que llevamos trabajando desde hace años. Este último año se ha trabajado mucho con AMFE, precisamente para poder ir todos a una y hacer un proyecto común para presentar en el Ministerio, aunque nosotros como sociedad científica tengamos nuestro propio proyecto de recertificación y nuestra propia plataforma donde se recoge todo el mapa de competencias de los médicos de familia.
En la última rueda de prensa de la semFYC, que se realizó en el marco del Congreso, se esbozó la idea de impulsar una Ley de Atención Primaria ¿Hasta qué punto es prioritario para la semFYC?
El reto más importante de cara al futuro es asegurar un nuevo modelo de Atención Primaria, necesario para dar entrada al resto de actores que participan en la AP: enfermeros, auxiliares, decanos, administrativos sanitarios y resto de trabajadores deben caminar juntos hacia ese nuevo modelo. Ante eso, creemos que es necesaria una Ley de Atención Primaria que asegure que, independientemente de quién esté en el Gobierno, los ciudadanos tengamos una AP de valor, segura, inclusiva, sostenible y económicamente bien presupuestada. En efecto, ese es otro de nuestros retos: conseguir que la Atención Primaria tenga un presupuesto específico y blindado, que sea finalista pero no deje de ser blindado.
¿Qué otras líneas claves crees que se abren como sociedad en los próximos años?
Respecto a nuestros socios, todos ellos esperan que la sociedad defienda su especialidad y su situación como médicos y médicas. Es interesante el hecho de que somos una sociedad científica feminizada: el 70 % somos mujeres, un porcentaje que se incrementa enormemente en el rango de edad más joven. Y hay que hacer saber a las administraciones y a la sociedad en general la importancia de la conciliación laboral familiar. Esto no solo afecta a las mujeres, sino también a los hombres. Es cierto que todo esto ya se puede vislumbrar, pero sobre todo de cara a la conciliación familiar y laboral, hay que asegurar que nuestros jóvenes médicos y médicas de familia puedan conciliar su trabajo, pero también su formación. Nunca debemos olvidar la importancia de la formación continuada, aunque sea un reto cuando tienes hijos pequeños. Por eso, debe estar contemplada dentro del ámbito laboral.
Es importante la conciliación también en cuanto a los turnos de tarde, turnos con difícil cobertura. Creemos que se podría remodelar el sistema de turnos, para que los profesionales que accedan a ellos tengan facilidades a nivel familiar.
Las vacantes de MFyC en la asignación MIR de este año han causado un enorme revuelo ¿Qué valoración se puede hacer al respecto de esta cuestión?
Es cierto que tanto las Unidades Docentes como el sistema MIR están pasando por una situación compleja. Hay pocos tutores y los que hay tienen una labor muy poco reconocida, están sobrecargados… esto se dice poco. Hay que potenciar el papel y el reconocimiento tanto de los tutores como de los jefes de estudio. Ahora mismo, en la mayoría de las Comunidades Autónomas, ser tutor es una labor absolutamente altruista. Es un trabajo que se hace a favor de los valores de los médicos de familia, pero realmente, formar residentes es una actividad muy grata porque recibes muchísimo de ellos. Formar residentes es muy enriquecedor y cuando luego se convierte en un joven médico todavía te enriquece mucho más. Es emocionante trabajar con jóvenes médicos de familia a quienes has formado, que te hagan aportes científicos es realmente enriquecedor.
A menudo se ha reclamado desde la semFYC que el problema con las vacantes y renuncias de MIR es el desconocimiento, y este se vincula siempre al reconocimiento de la especialidad en las Facultades de Medicina ¿Qué se propone?
Tenemos que impregnar la universidad de médicos de familia, tenemos que llevar nuestros valores, el conocimiento científico, clínico, la manera relacionarnos con los pacientes, la manera de hacer comunicación… Hay que mostrarles ese aspecto longitudinal que tenemos de atender al paciente en las consultas, a su familia, a su entorno, en fases de crisis laboral o clínica, en todo lo que es su ámbito como persona. Porque somos personas, eso es precisamente lo que enriquece a los médicos y eso se lo tenemos que enseñar a los jóvenes y a los estudiantes. No se puede parchear la medicina y enseñar cardiología, neurología, etc., sin tener en cuenta el contexto en el que el paciente tiene una enfermedad cardíaca o una situación personal muy concreta. De hecho, cada especialidad debería tener la visión del médico de familia, de la visión holística de la Medicina Familiar. Sin olvidarnos del rigor científico, no olvidemos que tenemos la gestión del conocimiento genérico. Y eso enriquece mucho a cualquier médico
También se debe reconocer la parte importante que juega la investigación en la medicina de familia, así como la investigación del Instituto de Investigación. Algo tenemos que articular para facilitar que los médicos de familia sigan investigando, porque en el hospital sí existe una discriminación para investigar; incluso las becas o los proyectos competitivos tienen una parte siempre hospitalaria y no tanto de primaria y ahí tenemos que incidir: en cómo hacer una discriminación positiva a la investigación en primaria.
A todo esto, hay que sumarle, por supuesto, seguir defendiendo nuestros valores, nuestras competencias clínicas y todo lo que conllevan los eventos de la semFYC, para conseguir que la Medicina de Familia y Comunitaria sea visible.
Anteriormente has trabajado con Pep Basora, Salvador Tranche y María Fernández. ¿Tu labor va a ser en ese sentido continuista o rupturista?
Creo que ambas cosas. Cómo me he enriquecido como persona y sobre todo dentro de la Junta de SemFYC en los últimos seis años es lo que me ha dado fuerza a poder dar este paso.
Con Pep tuve muy buena relación. Entonces yo estaba en el grupo Comunicación y Salud. Pero yo empiezo en la Junta Directiva con Salva y eso marcó mi camino después: somos una junta que hemos hecho piña.
Salvador fue muy generoso y confiaba en que éramos una junta muy trabajadora, y así fue, nos implicamos con él porque él también tenía este espíritu carismático de liderar. Y ha sido una delicia trabajar todos juntos. Cuando Salva fallece, María se convierte en la presidenta en funciones, trabajamos codo con codo con los proyectos iniciados. Así que ahora, como presidenta electa, hay que seguir con la semilla que plantó Salva.
¿Cómo definiría la Junta Permanente que ahora toma el relevo?
Esta es una junta de ilusión. Se mantienen cuatro seniors para dar un poco de continuidad al proyecto semFYC pero, sobre todo, se incorpora mucha gente joven que viene con muchas ganas. Además, se trata de una junta muy feminizada, porque el porcentaje de mujeres jóvenes en semFYC es muy elevado. Tenemos que tener en cuenta que entre lo que son residentes y jóvenes médicos el colectivo está todavía más feminizado. De ahí que vimos que era importante incorporar mujeres dentro de las vocalías y dentro de jóvenes médicos.
Otro de los pilares que pienso que es importante reforzar más es toda la parte de innovación, la universidad, investigación. Por este motivo tenemos un perfil de junta que toca todos los ámbitos de la medicina de familia, investigación, universidad, unidades docentes, prevención de la salud dentro del programa PAPPS, el PACAP o Comunicación y Salud. Somos una junta que está formada de todo lo que son las estructuras transversales importantes dentro de semFYC
Pero no solo eso, contamos con representantes de todas las áreas competenciales en los que estamos las y los médicos de familia. Así tenemos a representantes que vienen desde el ámbito rural, la urgencia, nuestros residentes y jóvenes médicos, y luego todo lo que son las estructuras propias de la semFYC como coordinadores de grupos de trabajo de programas, Comunicación y Salud, Unidades Docentes, investigación y universidad.
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